Querido Dios!

Querido Dios, hoy vengo a ti a decirte lo siguiente:

• Tú me conoces mejor que yo a mí mismo, que estoy creciendo poco a poco y que algún día seré viejo.
• Guárdame de aquella fea costumbre de pensar que debo decir algo sobre todos los temas y en todas las ocasiones.
• Libérame de algunas circunstancias para enderezar los asuntos de algunas personas. 
• Hazme reflexivo pero no de mal humor, útil pero no mandon.
• Con mi inmensa capacidad de la sabiduría, en momentos parece una lástima no poder usarlo todo, pero tú lo sabes, tú sabes porque haces las cosas!
• Mantiene mi mente libre. 
• Dame alas para llegar al punto donde tenga que alcanzar mi meta.  
• Es verdad que el amor se va convirtiendo en más dulce mientras pasan los años y eso es maravilloso.
• No me atrevo pedir la gracia suficiente para disfrutar de los cuentos de los dolores de los demás, pues una persona no debe de burlarse de las desgracias ajenas.
• Dame una humildad en crecimiento, libérame de los recuerdos que lleguen a ser dolorosos y no ayuden en la paz mental de mi persona
• Enséñame la gloriosa lección de que de vez en cuando puedo estar equivocado, y de esa manera, ayúdame a abrir mi mente a nuevas ideas y nuevas opciones.
• Dame la capacidad de ver cosas buenas en lugares inesperados, en lugares donde nunca imaginaba que iba encontrar las cosas maravillosas que nos da la naturaleza o la vida, talentos de las personas inesperadas. Y dame la gracia de decirles lo inmensamente feliz que me hace su trabajo así. Amen
  Derrama sobre nuestra vida y cada uno de nosotros...
  Amor, Paz, Salud, Sabiduría, Madures, Prosperidad
  Y lo más importante de todo, guíame por el buen camino. Amén